Cepyme expresa su decepción por el retraso en el reglamento europeo de morosidad
La Confederación Española de la Pequeña y Mediana Empresa (Cepyme) ha manifestado su descontento ante la nueva postergación del reglamento europeo sobre morosidad, el cual busca fijar plazos de pago para evitar retrasos indebidos en las transacciones comerciales dentro de la Unión Europea.
Principales puntos destacados:
- El reglamento busca establecer un plazo máximo de 30 días para realizar pagos entre empresas y de 60 días para realizar pagos entre empresas y organismos públicos.
- Esta medida pretende garantizar la liquidez de las empresas y favorecer un clima de competencia justo en el mercado europeo.
- El incumplimiento de los plazos de pago acarrearía intereses de demora y una compensación por los costes de cobro.
Desde Cepyme se destaca la importancia de esta normativa para el tejido empresarial, especialmente en un contexto marcado por la crisis económica derivada de la pandemia de COVID-19. La confederación manifiesta su preocupación por los efectos negativos que puede tener esta demora en la aplicación del reglamento, instando a las autoridades europeas a acelerar su puesta en marcha.
A pesar de este revés, Cepyme mantiene su compromiso de trabajar en pro de los intereses de las pequeñas y medianas empresas, velando por la equidad y la transparencia en las relaciones comerciales a nivel comunitario.
Conclusión
La postergación del reglamento europeo de morosidad ha generado malestar en el sector empresarial, que ve en esta medida una herramienta fundamental para promover la estabilidad y el crecimiento económico en la UE. Es necesario que se busquen soluciones que permitan una pronta implementación de esta normativa en beneficio de todos los agentes involucrados en el ámbito comercial.