La caída del Euríbor no se traduce en firmas de hipotecas: descienden un 5,5%
El impacto en la firma de hipotecas a pesar de la baja del Euríbor
El Euríbor, el índice al que se encuentran referenciadas la mayoría de las hipotecas en España, sigue cayendo, pero esta rebaja no se ve reflejada en el número de hipotecas firmadas. A pesar de que el Euríbor está en mínimos históricos (-0,498%), las hipotecas constituidas sobre viviendas retrocedieron un 5,5% en junio en tasa interanual, a la espera de las decisiones del Banco Central Europeo (BCE).
Las cifras reveladoras
En junio de 2024 se firmaron 20.833 hipotecas, lo que supone un descenso del 5,5% respecto al mismo mes del año anterior, según los datos del Instituto Nacional de Estadística (INE). Este retroceso se produce a pesar de que el Euríbor sigue en caída, lo que podría interpretarse como una falta de confianza en las condiciones económicas venideras o la incertidumbre provocada por la situación geopolítica y las posibles consecuencias en la economía.
¿Qué impulsa esta situación?
Varios factores podrían estar influyendo en la baja demanda de hipotecas a pesar del Euríbor en mínimos:
- **Incertidumbre económica**: la situación geopolítica actual y las posibles consecuencias económicas que se deriven.
- **Falta de confianza**: los consumidores pueden estar esperando a ver cómo evolucionan las condiciones económicas antes de comprometerse con una hipoteca.
- **Decisiones del BCE**: la expectativa de nuevas bajadas en los tipos de interés por parte del Banco Central Europeo podría estar frenando la demanda actual.
Conclusión
A pesar de la tendencia a la baja del Euríbor, las cifras de firmas de hipotecas en España no reflejan este descenso. Factores como la incertidumbre económica y la falta de confianza podrían estar jugando un papel importante en la decisión de los consumidores. La espera de nuevas decisiones por parte del Banco Central Europeo también puede estar influyendo en esta situación.
En definitiva, la evolución de la economía y las decisiones futuras de entidades como el BCE estarán muy ligadas a la demanda de hipotecas y al eventual repunte en la firma de estos préstamos hipotecarios.