Por qué no debes fiarte del color del ‘culo’ de la sandía ni de las pepitas para saber si es buena
¿Cómo elegir una sandía de calidad?
La elección de una buena sandía va más allá del color de su cáscara y de las pepitas en su interior. A menudo, se cree que una sandía madura debe tener la cáscara verde oscura y el ‘culo’ amarillo. Sin embargo, estas no son indicaciones fiables de su calidad.
¿Qué factores determinan la calidad de una sandía?
Para seleccionar una sandía sabrosa y madura, es importante tener en cuenta los siguientes aspectos:
- El sonido al golpearla: Debe sonar a hueco, lo que indica que está madura.
- La textura de la cáscara: Debe ser rugosa y mate, no brillante.
- El peso: Debe ser pesada en proporción a su tamaño, ya que una sandía madura contiene mucha agua.
- La base: Si tiene una mancha amarilla en la base, significa que ha madurado adecuadamente en el campo.
Conclusión
El color del ‘culo’ de la sandía y la presencia de pepitas no son indicadores fiables de su calidad. Para elegir una sandía sabrosa y madura, es recomendable prestar atención a su peso, sonido al golpearla, textura de la cáscara y la presencia de una mancha amarilla en la base.
Recuerda que, a la hora de comprar una sandía, la experiencia y los consejos de un frutero de confianza pueden ser de gran ayuda para garantizar que elijas la mejor opción.
PALABRAS CLAVE: sandía, calidad, madurez, selección, fruta.
