De iglesia a rocódromo: una parroquia de Bruselas se transforma en un templo para escaladores

Una iglesia emblemática da un giro inesperado

Una parroquia de Bruselas ha sorprendido a propios y extraños al transformarse de un lugar de culto tradicional a un rocódromo para escaladores. Este cambio, llevado a cabo en la Iglesia de San Pablo, ha despertado gran interés tanto en la comunidad local como a nivel internacional.

El nuevo destino de la Iglesia de San Pablo

– La Iglesia de San Pablo, situada en el barrio de Marolles, ha sido reacondicionada para albergar paredes de escalada en lugar de bancos de iglesia.
– Este espacio único ofrece a los amantes de la escalada la posibilidad de practicar este deporte en un entorno sagrado y diferente.
– El proyecto de transformación fue liderado por el escalador belga Nicolas Vanhee, quien vio en el edificio un potencial para combinar la espiritualidad con la práctica deportiva.

Reacciones y expectativas

– Tanto la comunidad religiosa como los escaladores han expresado opiniones divididas ante esta nueva faceta de la parroquia.
– Algunos consideran que la adaptación de la iglesia a un rocódromo es una forma innovadora de darle un nuevo uso al edificio y atraer a diferentes públicos.
– Otros, en cambio, muestran cierta reticencia ante la transformación de un lugar sagrado en un espacio para deportes extremos.

Un cambio que promete debate

La transformación de la Iglesia de San Pablo en un rocódromo ha generado un intenso debate sobre la reinterpretación de espacios tradicionales y el equilibrio entre la tradición y la modernidad. Este inusual proyecto promete seguir dando que hablar y despertando reflexiones sobre la relación entre la espiritualidad y el deporte en la sociedad actual.

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